© A OCTAVIO
para el Coronel Jorge Solano
ESCUCHO tu vida hijo,
pequeño cuerpo,
querubín de fuego,
extensión de mis cauces melancólicos,
pintura de un mismo lienzo
que ha salido como el agua presurosa.
Si yo muero tú eres mi testigo,
si muero ven a esta casa de palabras,
mi alma que fue como un trozo de lino
tendido al viento en un solar luminoso,
ahí existe más que cuando vivía
y si pones atención
escucharás mi único nombre
y voz verdadera
que no es hombre ni hembra,
ni humana, es el viento,
sombra disecada
en la floresta,
tímida fragancia de yerba virgen,
lluvia recién inaugurada,
rugido de un tigre asediado
por la tribu que teme
y dispara sus flechas.
Hijo, Octavio amado,
ese es mi espíritu inmortal
habitante una vez
en la carne y hueso humano
y que se aligeró en gastarlos
para de nuevo ser vuelo
y de ahí este malquerido:
no era él para estar ceñido
a un simple cuerpo ansioso,
solo vine a cumplir mi parte
que existieras
más allá de mi propia vida,
y en alguna hora calma
seremos unidad ya para siempre,
pasajeros de una nave
que boga por las estrellas y milenios
desde antes y después de todo.
Náralit, sábado 9 de marzo de 2013.
Imagen: mi hijo Octavio.
Texto inédito.
Texto inédito.
© SI ASÍ FUERA DE SENCILLO REMONTAR
DE MIS CENIZAS
ESTA vieja de paso
advierte de mi espejo que atrapa
lo bueno, lo feo y lo malo,
cúbralo señor
con paño negro
para que absorba la mala vibra,
hágase usted una limpia
porque lo noto raro:
sus ojos hablan
de un hechizo hace rato,
y no suelta el vuelo,
dele los 20 al vino;
este 13 de la poesía tampoco le reporta,
es como boxear contra el viento
y nunca va a ganar
aunque fueran 100 rounds,
no sea vago, crea en Diosito
todo lo puedo en él que me fortalece;
no confíe en la Mujer…
Vaya al mercado
y compre estas yerbas,
regrese en silencio
sin decir a nadie,
cierre su vida
y póngase cuarentón,
resístasele al Negro que vendrá
en una de esas tentadoras horas
de la santa guarda
en que la incertidumbre
nos coge por los cuernos
y deja en pelotas
en mitad de la nada,
rechácelo de plano
pluma por pluma con los NONONO
y regréselo al bajo reino
con su gran oferta pestilente,
pues más vale mendigo libre
que rey preso de la riqueza.
Hasta entonces
a ver que pasa mijo.
***
“Naralit” (Poemas y Antipoemas de Frank Ruffino), escrito 5 de marzo de 2013.
ESTA vieja de paso
advierte de mi espejo que atrapa
lo bueno, lo feo y lo malo,
cúbralo señor
con paño negro
para que absorba la mala vibra,
hágase usted una limpia
porque lo noto raro:
sus ojos hablan
de un hechizo hace rato,
y no suelta el vuelo,
dele los 20 al vino;
este 13 de la poesía tampoco le reporta,
es como boxear contra el viento
y nunca va a ganar
aunque fueran 100 rounds,
no sea vago, crea en Diosito
todo lo puedo en él que me fortalece;
no confíe en la Mujer…
Vaya al mercado
y compre estas yerbas,
regrese en silencio
sin decir a nadie,
cierre su vida
y póngase cuarentón,
resístasele al Negro que vendrá
en una de esas tentadoras horas
de la santa guarda
en que la incertidumbre
nos coge por los cuernos
y deja en pelotas
en mitad de la nada,
rechácelo de plano
pluma por pluma con los NONONO
y regréselo al bajo reino
con su gran oferta pestilente,
pues más vale mendigo libre
que rey preso de la riqueza.
Hasta entonces
a ver que pasa mijo.
***
“Naralit” (Poemas y Antipoemas de Frank Ruffino), escrito 5 de marzo de 2013.
© MIMETISMO
DESCONECTO
la máquina que avisa
antes de matar,
incrusto el corcho al vino,
apago el cigarro,
no respiro, cierros los ojos,
y La Parca,
que pasa revista,
no me ve.
"Náralit", 14 de marzo de 2013.
DESCONECTO
la máquina que avisa
antes de matar,
incrusto el corcho al vino,
apago el cigarro,
no respiro, cierros los ojos,
y La Parca,
que pasa revista,
no me ve.
"Náralit", 14 de marzo de 2013.
Buenos textos, enternecedor el de tu hijo.
ResponderEliminarBeso,
Camila B.
Gracias Camila.
ResponderEliminarAbrazos fraternos en Amistad y Poesía verdaderas,
Frank Ruffino
Gracias Camila.
ResponderEliminarAbrazos fraternos en Amistad y Poesía verdaderas,
Frank Ruffino