miércoles, 6 de abril de 2011

© Imaginando negro




Gracias puñal por tu incursión
y desgajar mis venas
y partir en dos mi corazón,
mis parabienes
por matarme aun vivo,
cosa que me ha dado
para tres últimos pensamientos:

Uno era niño de la mano
del viento al filo de un vacío,

otro cuando principiaba el beso

y el final, el baile frenético
de Octavio amado,
el último de los niños.

Ahora nada, blanco paisaje frío.
Entro.

***
© "Imaginando negro", de poemas y antipoemas, marzo 2011.

6 comentarios:

  1. Pensamiento negro por un puñal blanco... Imposible la entrega resignada, sería egoista que con esa muerte el puñal arranque el baile feliz al último niño. Sería entregarlo a él también.
    http://enfugayremolino.blogspot.com

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  2. Que no sea la imagen
    del puñal desgajando
    la vida la que nos lleve
    al negro pensamiento,
    cuando en el corazón
    está el imaginar
    el cálido paisaje del beso
    y la sonrisa del niño.

    Tus poemas siempre me dan
    mucho que reflexionar,
    profundos y bellos.

    Besos

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  3. como siempre un gusto leerte, muy bien logrado, me gusta

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  4. Serán las cosas importantes. Al final todo se reduce a la sonrisa, el amor y la nada que todo lo gesta.

    Un beso, Frank, y un abrazo

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  5. Pronto les contestaré amigas mías!

    Abrazos,
    Frank.

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  6. Ya lo encontré!! Lo había cambiado de lugar...

    Mi mérito consiste
    en la rara habilidad
    de sacarle punta al viento,
    en calcular las estrellas
    de tu cielo esta misma noche.

    Frank Ruffino

    Un abrazo

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