miércoles, 1 de diciembre de 2021

«MINAS DE OROPEL» QUE HACEN CAER A LOS TICOS «COOL». / Por Frank Ruffino.



A causa de las sorpresas del día a día en esta loca y degradada época actual, uno no tiene un respiro en este peligroso y corrupto país de «plastilina» (y planeta): a un teclazo de computador o dedazo celular, sectas religiosas y políticas, de pervertidos sexuales, de hechicería, de hordas de imbéciles que hacen del «esquema Ponzi» un altar que los lleva directamente al infierno de la miseria; etc., y, por lo visto, sectas de estafadores en masa respaldados por una bonita página web, construida, no de ladrillos, acero o cemento, sino a puro Fotoshop, Corel Photo-Paint...

...«Peligroso», por la especie humana, la más destructiva, asesina y «caníbal» de las especies cósmicas pensantes que existen (de la variedad de Jesús y sus entes de luz, seguro somos primos quintos), esto, hasta que los alienígenas que nos tienen en «cuarentena» (tal vez quinientos o mil años más, para ellos, como decir un lustro o década), nos demuestren lo contrario.

Tras dedicar un minuto a estudiar uno de esos sitios de oropel que es 
«Pietra Verdi» CR-Brasil, confieso, aún el brillo de toda esa bazofia deslumbrante de falsedad, me tiene nublada la vista del burdo resplandor de latón, como que nos coloquen dos súper parlantes pegados a los oídos con música de reguetón caribeño por un minuto, y vivir para contarlo.


Entonces, hoy en la televisión nacional y redes sociales aparece el «nibelungo» Álvaro Mora, desconocido y supuesto «líder» de «Pietra Verdi» CR (foto de la tele de este servidor corresponde a un vídeo de semejantes tribales llamando a la «calma»), lo resguardan, desde atrás, otros supuestos «líderes» ticos de «Pietra Verdi» (entre ellos un tipo semidesdentado y un carajillo con la gorra al revés), una firma con su casa matriz establecida en el bizarro y exótico Brasil del ultraderechista desquiciado Jair Bolsonaro (en el norte tenemos a Trump, y de vecinos, los dementes seniles malucos, La Chayo, Daniel y su poderoso ejército que, con sólo dos de sus aviones bombarderos caza Mig-29, poseen suficiente poder de fuego -misiles- para destruir carreteras, bancos, instituciones de los tres poderes, puentes y centrales eléctricas ticas: les bastaría media hora para devastarnos y volvernos a la Edad de Piedra. ¡Y los ticos nos creemos poderosos ante los nicas!).

Pero volvamos al brillo de las piedras preciosas falsas por Internet: supuestamente esta compañía de nombre megacómico (propio de programas y situaciones de «Los tres chiflados» o del notable humor nacional de «Pelando el ojo») explota supuestos yacimientos esmeraldinos en la delicada Amazonía. En sus páginas web y Facebook, presentan esas gemas, tan mentirosas y malas como los dirigentes actuales del PAC y los cinco o «diez» alcaldes del «Caso Diamante» (faltan varios por caer, del PLN y de otros partidos); porque, ni por asomo, en mi vida he tenido entre mis incrédulos dedos siquiera una piedrecilla verde de esas calidades, o sea: genuina.

El más famoso e importante Libro del mundo, apunta sabiamente en un versículo que «El que es malo es tonto». Por supuesto: «el crimen perfecto no existe»
y casi nunca paga a mediano plazo y muy poco a largo plazo, por ello, desde «Tres pelos» (qdDg) o el «Diablo» tico en fuga, hasta el Chapo Guzmán o Pablo Escobar, terminaron y terminarán muertos o presos, y este destino es usualmente proporcional a su maldad, que siempre es estúpida porque se autodespojaron de la «piedra» más codiciada y preciosa de todas: La Libertad, y la Paz y Belleza que nos ofrece este concepto, el más elevado de todos.

Ahora bien, sobre la naturaleza y lucidez mental de esa multitud de nuevos ticos «cool» (ya el oro les parece sospechoso y aburrido) supuestamente estafados por «Pietra Verdi» CR-Brasil, ¿qué son estos compatriotas? ...¡Pues unos redomados tontos!, y, por lo general, los imbéciles se hacen mal así mismos y a los otros (si también se dejan embaucar por la idiotez de sus familiares, amigos y conocidos; algunos caen solitos), aunque no sean netamente malos profesionales.

Esa tribu de «psicópatas integrados» de la foto de mi tele, asegura, varios de ellos viajarán (¡OJO OIJ!) próntamente a Brasil a buscar más «esmeraldas» a fin de ponerse al día con los increíbles e insostenibles intereses ofrecidos a los inversionistas o bien devolverles esos millones que se dejaron sacar con
«guantes de seda», así, sin una pistola, hacha o cuchillo contra la cabeza o el cuello: sólo les bastó una linda imagen trucada por Internet para perder sus ahorros.



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