miércoles, 17 de octubre de 2012

© EMBRUJO LARGO, NEGRO, PROFUNDO…



 


a Jessimav

ELLA se va y 15 días después

y 30 días después y mucho tiempo
 
después de su partida definitiva
sus cabellos hasta echan pequeñas zancadillas,
en la sopa aparecen
y en un pescado que los mira, asombrado,
entre sus ojos,
y en mi celda compiten
con mis habituales telarañas mustias,
en la almohada duermen largos sueños rencorosos,
en la bañera con gracia de serpientes
nadan placenteramente estilo mariposa,
en mis sueños crecen en calvas cabezas
de rostros pétreos y fingidos,
un cabello enamorado donde guardo
mi celebrada arma de caza,
sus cabellos en mi clóset
poblando mis complejos de eremita,
sus cabellos en la alacena
como cualquier ingrediente necesario,
en los queridos objetos de familia,
en la bolsa de chorrear el café,
en el vetusto candelabro de plata
bailando con cinco llamas
en esta noche hórrida,
sobrevivientes siempre del maremoto de la lavadora
y luego como ufanos prendedores en mis camisas,
mirando con envidia en el cofre de las joyas,
sobre la foto del muerto
aumentando más el dolor de una nostálgica anciana,
en vilo del techo como anguilas tristes
sus cabellos, entre las amarillas hojas
de los libros que ya nadie lee en esta casa
porque todos partieron hace mucho…

La que limpia se queja y habla de brujería:

destapa el azucarero y dice:
“Ve, es brujería, usted está embrujado,
necesita limpia urgente, esto es serio!”…
mientras tanto yo, que la escucho
como si la cosa no fuera conmigo,
me columpio con cara de escepticismo
profundo y profano, en un largo,
negro cabello de ella.

***


“Náralit”, escrito esta madrugada de miércoles 17 de octubre de 2012 e incluido en el poemario inédito en proceso © “Hombre adjunto”.


También este texto en mi Facebook: "Frank Ruffino García”:


http://www.facebook.com/frank.ruffinogarcia

jueves, 11 de octubre de 2012

© POSTAL DE ÚLTIMO DÍA…





A Ana María García, a su hija Mariel (+)

POSTAL de último día,

ocaso de seres,

el gran ángel blanco de la noche
silencioso, vuelo de seda,
quiebra el cielo,
loritos agitados en el aire,
y al fondo fantasmales luces
de un tiempo ido
en la noche fría.

También, allá, muy lejos,

en Puerto Madryn,
el gran ángel blanco de la noche
la apuñala diez veces
solo porque era bonita,
solo porque era buena,
solo porque tenía mucha vida aún.

Y yo, que hasta ahora no sabía

de lágrimas me deshago
mientras el gran ángel blanco de la noche
carga de nuevo contra el follaje
y arrebata otro a la bandada;
ella cae también
y piensa en su madre,
en su pequeña hija,
que se le hace noche.
Trémulo,
sollozo sin haber practicado nunca
para estos crímenes tan extraños.
***

Náralit, 11 de octubre de 2012. Poema inédito de Frank Ruffino.


Imagen: Mariel, asesinada hace siete meses en Puerto Madryn, hija de mi amiga, la animadora y periodista argentina, Ana María García.