sábado, 31 de julio de 2010

©El malquerido



Escribo, y algo sorbe mi sangre,
algo consciente que ante

la hoja blanca uno está mudando

de piel, vulnerable…


No dudo que hay algo

de tales características en este pueblo,

algo que también el otro día me dejó

desconcertado en el mercado:

un niño de meses dirigiéndose a mí

sacó su lengua, larga, bífida,

con una costra de blanco sarro inquietante.

Seguro algo en el ambiente…

¡Y en qué comarca hay

un sordomudo

cinturón negro 5ºDan!

Un Bruce Lee silencioso

que viene a cobrarme

mis ofensas de infancia

y desea una opo
rtunidad para impartirme
una clase magistral

de oratoria en su estilo.

Pero no le temo:

la verdadera ofensa viene de las palabras,

él no tiene poder sobre mí.

***
©
"El malquerido", Frank Ruffino, Náralit, junio 2010.

*Imagen de este servidor. No se asusten, no soy pandillero. Solo bromeaba con mi hijo mayor hace unos años y le hizo tanta gracia que dejó plasmado ese momento.

jueves, 29 de julio de 2010

©Posesión cósmica



El diablo anda solitario

por tu calle, siempre

abandonada de tres en punto.


Mira a las estrellas

y las maldice,

sabe que eres

tu propio dios de niebla

y te ha visto

en otra oscuridad

a la misma hora

beodo sobre el húmedo

pavimento

cuando precisamente

se precipitaba la sustancia

y un sapo sobre tu pecho

maldecía a Dios.


Ese agujero negro

sorbe los ojos,

el resto del alma

y la poesía...;

transforma tus despojos

y reinas en una dimensión ignota.


Aquí solo has quedado

con tus alas sucias
en medio de la noche.


©"Posesión cósmica", Frank Ruffino, "Náralit", junio 2010.

domingo, 25 de julio de 2010

©Para no decir ahora, hoy, esta tarde…


a mis amigos españoles Antonia Sánchez y Manuel Adlert


Para no decir ahora, hoy,

esta tarde…

mejor aquí adentro se me ocurre

destronar al tiempo,

mi único haber es este presente:

sin conjugación futura,

solo continuidad

de puntitos multiplicándose

con cada respiro,

a punta de morder el alimento

de diferente manera,

remitiéndole a ella

una carta sin fecha

y consumir montones

de esos puntitos esperando

que sus sentimientos

correspondan a los míos…


Destronar al tiempo

común de los mortales,

el inventado, ese señor

vendido y comercial

auspiciador de más ansias

y ataques cardiacos

que la píldora del amor...


A él me refiero, no hay manera

de que la gente del ahora

comprenda tales palabras:

en este pueblo me tachan de loco,

filósofo poeta sin capacidad

para comprarse un 4X4 full extras;

desheredado, Quijote,

camarada de Chávez,

Che Guevara,

amigo de juerga de Rasputín…


No importa: en este espacio

seguiré con mi tiempo

que solo me importa vivir

de tal o cual manera

sin calendario ni relojes,

sumando puntitos

al ritmo de la sangre,

nunca restándolos

hasta estancarme en un pantano

de remordimientos

ni tratando de coger demasiados de ellos

evitando vivir en días

de un porvenir inexistente.


Solo así, con mi escala azul presente,

paso a paso, cruzando puentes

sin apurar el paso

ni mirar hacia abajo…


pues la muerte es otra cosa

que también deberá esperar su tiempo.


***


©“Para no decir ahora, hoy, esta tarde…”. Frank Ruffino, Náralit, 25 de julio de 2010.


viernes, 23 de julio de 2010

©La euforia se ha ido y queda el calor salvaje


 


LA euforia se ha ido y queda
el calor salvaje de la gente
aunado al duro verano
haciendo casi imposible
respirar en este sótano
que hace las veces de piso.

España cree haber ganado
pero cuán equivocada está España!
ahora que veo en el Hemiciclo
a este perro y gato
comprendo que para que más
de 40 millones ganen de verdad
se debe cambiar
de estrategia y de estrategas.

Excepto del bolsillo de los premiados,
este triunfo mundial
es solo otra ilusión óptica,
lo mismo que el fluctuante muchacho del tenis,
el flaco de la bicicleta,
este gigantón con su anillo de la NBA
que solo a él le queda
en toda España…

Y esta sonriente familia de sangre azul
viene de las Pléyades,
no hay otra explicación posible.

Aquí, con la Roja pero en números rojos
sin sumar por todo esto una lenteja a mi plato
-píldora de resistencia
que vuelve a recetarnos
el doctor Negrín-.

La euforia se ha ido
y he quedado
solo en mi sótano restando,
dividiendo mis haberes…

Del tiempo de las sumas
ya nadie se acuerda.

****
© "La euforia se ha ido y queda el calor salvaje", Frank Ruffino, Náralit, 15 de julio de 2010.

sábado, 17 de julio de 2010

©Constancia





Seguir mirando los vertiginosos

por el aire entre solares,

salir a la calle y apurar el paso;

tener aún un lindo recuerdo,

también recordar con desencanto

todos esos años perdidos

cuando creía en dios,

y ahora soy como estos fugaces

seres despertando a la mañana

aparentemente alegres,

pero es su manera de existir:

trinan con el único propósito

de delimitar su territorio

y en ello son más artistas que Caruso.


Debería emularlos

con más ahínco

y tal vez algo bueno

pueda conseguir en la hoja.


Silbaré a todas horas:

en el baño de rigor,

a la mesa,

a pesar del tumulto de cantina,

caminando por la calle,

en el cine,

de compras en el supermercado,

enfermo y encamado,

y porqué no camino al cementerio,

viajando en autobús,

en el retrete,

pagando deudas,

soñando pesadillas,

martillando, desclavando,

ascendiendo los peldaños,

descendiendo los peldaños,

nadando,

pescando,

amando,

desamando…


Ya no dejaré de silbar nunca,

incluso después de todo

cuando se pronostica paz

estaré silbando como los pájaros,

por inercia, por territorial,

por infeliz y todo lo contrario.



***


©"Constancia", Frank Ruffino, Náralit, 17 de julio de 2010.